Pensar, ¿para qué? Un enfoque pedagógico fundamentado en los valores.

En nuestra práctica educativa es clave el bien, valor que se da a una acción que realiza una persona a partir de una inclinación natural a fomentar lo deseable, motivado por una comprensión del entorno, de las personas y/o de uno mismo.
A pesar de que nuestro proyecto se enfoca en el bien, no estamos libres del mal, es decir, los accidentes naturales o comportamientos humanos que se consideran perjudiciales, destructivos o inmorales y son fuente de sufrimiento moral o físico.
De allí la importancia de la virtud, en este caso la capacidad de producir un determinado efecto positivo o la disposición habitual para hacer el bien.
Es así, que el aporte a la comunidad, teniendo en cuenta el bien, el mal y la virtud consiste en planear acciones didácticas que parten de una inclinación natural a fomentar lo deseable para el estudiante y la comunidad educativa motivado por la comprensión del corregimiento de Pasacaballos desde su realidad en la cual hay que orientar al padre de familia a acompañar a sus hijos para teascender y mejorar calidad de vida a través de una educación que haga posible la creación de proyectos de vida empresariales turístico e industriales basados en una economía sostenible en armonía con la conservación del medio ambiente y el fortalecimiento de la identidad cultural.
En este proceso se está superando el mal, es decir, los comportamientos humanos perjudiciales que no permiten superar las precarias condiciones socio económicas asociadas con la falta de acompañamiento de los padres  con el proyecto PENSAR, HACER, VENDER...TAMBIÉN ES CIUDADANÍA! Capacitandolos en cursos con el SENA que les brinde conocimientos para trabajar o crear unidades productivas de negocio que construyan tejido social de la mano de un desarrollo de habilidades de pensamiento que propiciará una nueva sociedad pasacaballera pujante, educada y con una misión y visión empresaria con calidad de vida.